Luego de una visita a mi hermana por los Estados Unidos, en la que tuve la suerte de darme una pequeña vuelta de 2 días por Disney,
poder cenar con las Princesas de Disney,
ver a la primera sirenita asiatica de mi vida,
conocer la única campanita negra (y no lo digo en tono racista, que quede claro) del mundo y
enterarme, no solo, que Disney tenía contratados empleados específicamente para que busquen algun tipo de teta, seno, chichi o pezón en las fotos que toman durante las caidas más fuertes de las atracciones de los parques y las censuren para que a ningun infante le de hambre,
sino también enterarme que ahora GRACIAS A LA CRÍSIS MUNDIAL esa personas fueron removidas de sus puestos,
he llegado a la conclusión que quizas Disney o está cresciendo junto a algún tipo de generación determinada por razones estratégicas o está dispuesto a ser un aspiracional de generaciones para buscar suplantar a MTV.
De una forma o la otra, ¡QUE BACÁN QUE ESTÁ DISNEY!
Me hiciste cagar de risa con lo de las tetas.
ResponderEliminarAhora, para darle vuelta a este post, Disney se ha vuelto el rito de inicicación por excelencia para los niños pequeño-burgueses del mundo occidental. Es como que si uno no va a Disney, no fue niño... ¿no?
- ¿QUÉ? ¿NUNCA FUISTE A DISNEY? ¿NUNCA? ¿EN SERIO? ¿DISNEY? ¿TUS PAPÁS NO TE LLEVARON?
Tengo algo más que decir. Esas princesas interculturales me recuerdan al "it's a small world after all", donde todos los muñequitos de diferentes partes del mundo cantan y se agarran de las manos mientras EEUU sostiene una política migratoria de mierda. Disney me engañó... y además me quiso hacer creer que ser mujer se limita a ser una "princesa" que es mas bien una sirvienta que se queda esperando a que llegue su "príncipe azul" para ser alguien en la vida.
ResponderEliminarjajajaja muchas gracias por el comentario. Es verdad, maldita reforma migratoria. It's a small frontier after all debería ser. jajaja
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